2019 Lamborghini Urus primera revisión de la unidad

A fines de la década de 1970, Lamborghini se embarcó en un proyecto diferente a cualquier otro en la historia de la compañía. En un movimiento improbable, el fabricante italiano de autos deportivos decidió probar suerte para producir un vehículo militar liviano similar al AM General Humvee. Se produjeron tres prototipos (el Cheetah, el LM001 y el LMA001), pero los brutos con motor trasero nunca encontraron el favor de los compradores del gobierno, y el proyecto finalmente se archivó.

Para obtener un retorno de la inversión, Lamborghini decidió cambiar de rumbo, tomando el chasis utilitario del LMA001 y acoplándolo al motor V12 y la caja de cambios de cinco velocidades del supercoche Countach para crear el mercado civil LM002. Conocido coloquialmente como el "Rambo Lambo", aproximadamente 300 de estas bestias se produjeron en total entre 1986 y 1993.

Los SUV de alto rendimiento eran una anomalía en la década de 1980, pero hoy están usurpando los sedanes deportivos como la opción principal para aquellos que desean un rendimiento emocionante sin dejar de ser prácticos, un cargo que originalmente dirigió Porsche Cayenne en 2002.
Para sobrevivir y continuar desarrollando autos deportivos como el 911, teorizado por Porsche, necesitaban un vehículo que pudiera conectarse con compradores tradicionales adinerados que necesitaban un vehículo más versátil. Hoy en día, el Cayenne y Macan venden más que todas las otras ofertas de Porsche. Conjunto.

Ese cambio en el viento no se ha perdido en Lamborghini. Si bien la compañía ha disfrutado de siete años de crecimiento de ventas consecutivas, el aumento meteórico de los segmentos de servicios deportivos y de cruce se ha vuelto demasiado grande como para ignorarlo, por lo que ha respondido al mercado con el nuevo Urus.


Con un precio base de $ 200,000 (o aproximadamente $ 240,000 según la prueba), el Urus trae una cantidad de primicias a la mesa para la firma de superdeportivos. Es un modelo que Lamborghini promociona como "el primer súper utilitario deportivo del mundo", y luego de estar detrás del volante en la calle, en la pista y fuera de los caminos trillados, vemos pocas razones para discutir esa afirmación.

Si las proporciones del Urus te parecen vagamente familiares, no te preocupes, no estás imaginando cosas. La nueva utilidad deportiva de Lamborghini se basa en la arquitectura MLBevo de Volkswagen, una plataforma que el Urus comparte con la mencionada Cayenne, junto con el Audi Q7, Q8, Bentley Bentayga y Volkswagen Touareg. La estética, sin embargo, es un claro alejamiento de sus hermanos corporativos.

El lenguaje de diseño angular del Urus claramente se inspira en Huracán y Aventador, resaltado por un techo inclinado y una agresiva parrilla frontal que deja en claro las intenciones de desempeño del Urus. Golpeando desde ciertos ángulos y un poco alterado de otros, una cosa es segura: este SUV se destacará entre la multitud.

En el interior, el Urus encuentra a Lamborghini aventurándose en un nuevo territorio también. Esta es, sin lugar a dudas, la cabina más lujosa que haya producido el fabricante de automóviles italiano, enfatizando el confort, los materiales de máxima calidad y la tecnología de primera calidad. "Nuestros ingenieros se encargaron de reunir dos mundos que, digamos, están un poco distantes entre sí", explicó Alessandro Farmeschi, director ejecutivo de Lamborghini de las Américas. "Siendo que este es un SUV, debe ser cómodo y debe ser versátil".


Para ese fin, el Urus para cinco pasajeros está diseñado para acomodar pasajeros de hasta 6'7 "en la delantera, mientras que los asientos traseros brindan espacio para la gente de hasta 6’3". Los 22 pies cúbicos de volumen de carga detrás de los asientos traseros son espacio suficiente para guardar dos juegos de palos de golf, señala Farmeschi.

Además de la sensación de lujo de la cabina, se encuentra un nuevo sistema de información y entretenimiento que es un gran avance de la tecnología que se encuentra en otras partes de la cartera de Lamborghini. El sistema de infoentretenimiento III de Lamborghini, que lleva el nombre apropiado, consta de un par de pantallas táctiles en la pila central: la pantalla superior administra los medios, la navegación y otras tareas relacionadas, mientras que la pantalla inferior se usa para ajustes como el control del clima, proporcionando retroalimentación táctil a Permite ajustes más fáciles sobre la marcha.


El Urus también ofrece autonomía de nivel dos con calificación SAE con tecnología de asistencia al conductor estándar como control de crucero adaptativo, frenado automático de emergencia, asistente de luz alta y sensores de estacionamiento en la parte delantera y trasera del vehículo, mientras que otras características como una cámara de visión superior y un modo de acoplamiento de remolque son opcionales.

El selector de modo de conducción "Tamburo" de Urus está equipado con no menos de siete modos de conducción individuales: Strada, Sport, Corsa, Sabbia, Terra, Neve y Ego.


Los tres primeros se centran en la capacidad en carretera del Urus: Strada (calle en italiano) sirve como el modo de manejo predeterminado para el vehículo, mientras que el Sport baja la suspensión y mejora la caja de cambios. Corsa (italiano para la carrera) lleva el concepto varios pasos más allá, marcando la transmisión, la suspensión, el sistema de escape y otros parámetros de rendimiento en la carretera a sus ajustes de pista más agresivos.

Con un V8 doble turboalimentado de 650 caballos de fuerza ubicado debajo del capó y un sistema de suspensión que ha sido diseñado para funcionar tanto en la pista de carreras como en la tierra, es de esperar que el Urus sea un poquito más durante la conducción diaria. A decir verdad, el Urus es un corcel suave cuando se configura en Strada, con amortiguadores suaves que absorben efectivamente las imperfecciones en la carretera y el comportamiento relajado de la automática ZF de ocho velocidades.


Marque el modo de manejo hasta Sport y los hunkers Urus hacia abajo notablemente, la transmisión desciende unos pocos engranajes, y el escape deja escapar un poco más de su gruñido. Más estricto y más receptivo sin ser abusivo, el deporte demostró ser nuestro modo preferido durante nuestro viaje en la calle, aunque Strada tiene sus virtudes cuando quieres volar bajo el radar.